¿Alguna vez te has preguntado cómo de sostenible es el hecho de viajar o de qué manera nuestros viajes impactan en el medio ambiente? Hoy vengo a compartirte mi experiencia en mi primer alojamiento sostenible, muy reciente y en la provincia de Cádiz (España). ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!
Tabla de contenidos
Por qué decidí pasar mis vacaciones en un alojamiento sostenible
Comencé buscando alojamiento para este viaje a Cádiz entre los establecimientos más comunes: hoteles, apartamentos, casas rurales… Hasta que me topé con este alojamiento sostenible en Airbnb. Además de enamorarme el lugar en sí junto con la decoración y el entorno, me gustó el hecho de tener mi primera experiencia puramente respetuosa con el medio ambiente.
Y por ser diferente. Que al fin y al cabo, probar cosas nuevas ¡nunca viene mal!
El alojamiento sostenible en Pago del Humo (Cádiz)
Efectivamente, se trataba de una tienda de campaña, aunque he de decir que la más chula que he visto en mi vida. La decoración era increíble y el entorno apuntaba a que la experiencia sería maravillosa.
La cocina y los aseos se encontraban separados de la zona de la tienda, algo que para algunos puede ser un inconveniente. Sinceramente, para mi no lo fue. Lo vimos más como una experiencia con pleno contacto con la naturaleza.
Luces Solares
Gran parte de las luces que rodeaban la zona de la tienda de campaña eran solares, es decir, que se iluminaban por la noche con la luz obtenida durante el día.
Materiales reutilizados para nuevos objetos
No pudimos evitar percatarnos de la existencia de varios objetos del hogar creados a partir de materiales reutilizados. Un ejemplo es este posaplatos hecho con tapones de botellas de vino.
Decoración hecha a mano
Otro de los aspectos que le daba un encanto especial a este alojamiento sostenible era la decoración o útiles de baño o cocina hechos a mano. En la foto se puede ver un colgador para las toallas fabricado con un tablón de madera y tapones de corcho.
Champú y gel de baño
El champú y el gel de la ducha eran libres de sulfatos, siliconas y parabenos. Buenos para el medio ambiente y para tu pelo. Además se encontraban en dos dispensadores, evitando así el uso de plástico como los clásicos botes pequeños de los hoteles.
Cocina
Tener una cocina disponible durante un viaje, además de suponer un ahorro importante, puede contribuir también a evitar el uso de comida rápida, que siempre viene acompañada de envoltorios y plásticos innecesarios. El alojamiento sostenible contaba con esta cocina con dos fuegos para cocinar, frigorífico y todos los utensilios necesarios.
Mi reflexión sobre la sostenibilidad en el viaje
El simple hecho de volar en avión produce una contaminación que contribuye notablemente al efecto invernadero. Si pensamos incluso, a escala más pequeña, nos damos cuenta de que todo gesto cuenta a la hora de ser respetuosos con el planeta.
Como viajera, considero que las personas viajamos porque queremos disfrutar de las maravillas que el planeta nos ofrece. Esto me ha hecho darme cuenta de que, como mínimo, deberíamos esforzarnos en comportarnos de la manera más respetuosa posible, haciendo que futuras generaciones puedan disfrutar de lo mismo que nosotros.
Por este motivo y teniendo en cuenta los estragos a los estamos sometiendo a la Tierra, considero necesario hacer de esta actividad algo sostenible. En mi caso, hace tiempo empecé a realizar pequeños gestos que intento aplicar en mi vida diaria (reducción de los plásticos, opciones reutilizables o incluso champú o gel sólido). ¡Quizás sea un buen momento para dar un salto más grande!